Lectura del día: Num. 25:1 - 26:34; 1 Cron.7:14-19; Num. 26:35-37; 1 Cron.7:20-29; Num. 26:38-65
Verso Central Números 25:12-13
Dile, pues, a Finés que yo le concedo mi pacto de comunión, por medio del cual él y sus descendientes gozarán de un sacerdocio eterno, ya que defendió celosamente mi honor e hizo expiación por los israelitas." (NVI)
El “espíritu
moabita” siempre ha sido uno de los “espíritus” más exitosos en desviar al creyente
del plan de Dios para su vida. Cuando el enemigo falla por medio de la persecución,
tentación, o de cualquier otro medio externo, para detener el propósito de Dios
en la vida del discípulo, su recurso más efectivo, siempre ha sido el de
seducir a los discípulos con los deseos de la carne. El espíritu moabita
representa la seducción de los hijos de Dios a través de los deseos de la carne.
En nuestra historia de hoy, lo vemos manifestado en la sexualidad desordenada,
el desenfreno, y la idolatría. En los capítulos anteriores vemos que los reyes
de los moabitas habían contratado a Balaam para que maldijera al pueblo de
Dios. En esa ocasión los israelitas habían sido protegidos por Dios, y ninguna
de las maldiciones que se declararon sobre ellos, les afecto,
antes bien, Dios uso a Balaam para bendecir a Israel. Cuando Balaam vio que no
podía maldecir a los hijos de Dios, entonces recurrió a la estrategia que
lamentablemente, rara vez le ha fallado; seducir al pueblo (discípulos) con los
deseos de la carne, ya que, al ceder a la seducción, se le está abriendo la puerta a la
maldición. He aquí, éstas
fueron la causa de que los hijos de Israel, por el consejo de Balaam, fueran
infieles al SEÑOR en el asunto de Peor, por lo que hubo plaga entre la
congregación del SEÑOR. (Num. 31:16)
Lo
que le “abrió” la puerta a la “plaga” ocurrió cuando los hijos de Dios
permanecieron en la cercanía de esta ciudad influenciada por una religión
sensual, Mientras los israelitas acampaban en Satín, comenzaron a
prostituirse con las mujeres moabitas, (Num. 25:1 NVI)
El enemigo sabía que
mientras el pueblo estuviera caminando en santidad no lo podía tocar, pero al participar
del pecado, ellos mismos le abrieron la puerta a la maldición.
En vez de
acampar cerca de la influencia de esta nación pagana, ellos deberían de haber
seguido avanzando en el propósito de Dios. Al quedarse cerca de ellos, fueron influenciados
a participar de sus festivales donde se honraba a sus dioses y se practicaba los
rituales de prostitución sagrada. Eso es lo que quiere decir cuando menciona
que se comenzaron a prostituirse con las mujeres moabitas.
Los sacrificios a
sus dioses era un festival o celebración a sus dioses en los cuales se ofrecía
sacrificios, ritos y comidas en conexión con la adoración del dios moabita
llamado Baal Peor. En estos sacrificios una de las practicas era que las
mujeres tanto casadas como solteras, se ofrecían sexualmente a los que adoraban
a este dios. Para los Cananitas el acto sexual representaba la unión del
adorador tanto física y espiritual con su dios. Este tipo de prostitución
“sagrada” era una forma de que el hombre se unía a su dios. Los israelitas eran
el pueblo escogido por Dios, y ellos al participar de la adoración moabita,
estaban aceptando a Baal y rechazando al único Dios verdadero.
Ellos se olvidaron
del pacto que habían hecho con Dios. Por esta razón cuando el pueblo se “unió”
al dios Baal Peor, la reacción de Dios, fue la de cortar definitivamente a los que
olvidaron que ellos eran el pueblo santo de Dios, Entonces el Señor le dijo
a Moisés: "Toma a todos los jefes
del pueblo y ahórcalos en mi presencia a plena luz del día, para que el furor
de mi ira se aparte de Israel." Moisés les ordenó a los jueces de
Israel: "Maten a los hombres bajo
su mando que se hayan unido al culto de Baal Peor." (Num. 25:4-5 NVI)
El enemigo sabe muy bien que mientras vivamos una vida bajo los principios de
su palabra, El no podrá tocarnos, y no podrá detener el propósito de Dios en nuestras
vidas. Los enemigos del pueblo de Dios sabían que esta era su última
oportunidad de detener el avance de Israel, ya que estaban a las puertas de la
tierra prometida, y solamente el pecado podría detenerlos. El pueblo fue influenciado,
porque permaneció en medio de esta gente el tiempo suficiente como para bajar
su guardia y permitir que la tentación los sedujera.
¿Has permitido que a
través de los deseos de la carne el enemigo te robe lo que Dios tiene para tu
vida? ¿Qué necesidades hay en tu vida que el enemigo puede explotar para
derrotarte?
Por último, no nos expongamos a la mala influencia de las modas y
costumbres de este mundo. Debemos de cuidar nuestros sentidos, y no dejar que
la sensualidad cautive nuestro corazón. (Leer Romanos 12:1-2.)
Oración: - Consagra a Dios este día tu
vida, y no permitas que el deseo de la carne te robe su propósito.
- No “permanezcas” cerca de
aquellas cosas, o personas que te influenciaran para pecar.
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3 comentarios:
demasiaado interesante lo que acabo de leer, que bendición. Sigan publicando palabras de vida. Eso es lo que permanece.
Doy gloria A Dios por esta palabra, es la respuesta que buscaba a raiz de un demonio que el Señor mostro de una persona sercana a mi, yo solo lo reprendi, pero no sabia que significaba. Hoy encuentro esta palabra y me da la respuesta de todo, se que debo seguir batallando con este demonio, pero si Dios me ha regalado esta palabra es porque ya tengo la victoria. Muchas gracias Pastores, y la gloria sea para Dios en todo tiempo. Amen
Me da gusto saber que Dios te ayudo a vencer, y que ahora vas camino a la victoria. Bendiciones
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