miércoles, 15 de febrero de 2012

Las Personas de Quien nos Rodeamos


Día No 118                                                          

Lectura del día:        Sal.16:1-11; 2 Sam.5:6-10; 1 Cron.11: 4-9; 2 Sam 5:17-21;1 Cron.14:8-12; 2 Sam.23: 13-17; 1 Cron.11:15-19; 2 Sam 5: 22- 25; 1 Cron. 14:13-17; 2 Sam 5:11-12; 1 Cron. 14:1-2; 13:1-14; 2 Sam 6:1-11; Sal.101:1-8
Verso Central           Salmo 101:6

Pondré mis ojos en los fieles de la tierra, para que habiten conmigo; sólo estarán a mi servicio los de conducta intachable. (NVI)

Las personas de quien nos rodeamos son determinantes para que vivamos vidas de éxito, o vidas de fracaso. La clase de personas con las que nos asociamos, ya sean empleados, amigos, socios, amistades, ministerios, o lideres es una de las cosas más importantes en el éxito permanente en la vida. En el Salmo 101 David nos muestra las características que buscaba en las personas de quien se rodeo para cumplir la voluntad de Dios en su vida. En primer lugar, nunca permitiría la deshonestidad, y no se asociaría con personas deshonestas, No me pondré como meta nada en que haya perversidad. Las acciones de gente desleal las aborrezco; no tendrán nada que ver conmigo. (Sal. 101:3 NVI) Segundo, no solamente debería alejar la deshonestidad, pero aun las intenciones perversas, o no permitiría personas con intenciones perversas, no solamente es importante lo que alguien hace, pero sus intenciones, Alejaré de mí toda intención perversa; no tendrá cabida en mí la maldad. (Sal. 101:4 NVI) Tercero, David sabia que el éxito a largo plazo está fundamentado en el carácter integro de la persona, y de sus asociados, o discípulos que son parte de su equipo, o de sus empleados. Estas son las características que David evitaba, La mentira, la soberbia u orgullo, Al que en secreto calumnie a su prójimo, lo haré callar para siempre; al de ojos altivos y corazón soberbio no lo soportaré. (Sal. 101:5 NVI) Estas características son más peligrosas cuando hemos alcanzado cierto éxito, que cuando tenemos problemas, o estamos pasando por momentos difíciles. Por este motivo, desde el principio debemos de tener cuidado en que no sean parte de nosotros mismos, ni de las cosas que hacemos, así como de las personas que nos rodean. En ocasiones será mejor perder a una persona “talentosa” pero que tiene problema de carácter, especialmente cuando se le ha ministrado sobre esta área de su vida, y no quiere cambiar, David era muy enfático en esto, Jamás habitará bajo mi techo nadie que practique el engaño; jamás prevalecerá en mi presencia nadie que hable con falsedad. (Sal. 101:7 NVI) antes que mirar los talentos o experiencia de las personas de las cuales nos rodeamos como líderes, pastores, u empresarios, debemos de observar y poner a prueba cuidadosamente su carácter, y su manera de actuar, las decisiones que han tomado, y como manejan su matrimonio. (Si está casado) Siempre debemos de entender que lo que somos es más importante que lo que hacemos, porque lo que hacemos sale de lo que somos. Los líderes de los cuales me rodeo como pastor, o empresario, o líder son el “material” de los cuales “saldrán” los demás líderes que se generen de mi ministerio, u empresa. Nuevamente la palabra de Dios dice, Pondré mis ojos en los fieles de la tierra, para que habiten conmigo; sólo estarán a mi servicio los de conducta intachable. (Sal. 101:6 NVI) El éxito que David tuvo a diferencia de Saúl se debió en mucho a la clase de gente de cual se rodeo desde el principio de su reinado. Lo mismo sucederá con nosotros, por eso es muy importante que seamos muy cuidadosos a cuales personas les permitimos que sean una parte influyente de nuestras vidas.
Oración:
  • Pedir a Dios que nos ayude a evaluar con cuidado las personas de las cuales nos rodeamos.
  • Evaluar nuestra vida a la luz de lo que hoy has aprendido de la palabra, y la vida de los que en este momento nos rodean.
  • Tomar decisiones que aunque sean difíciles; ya sea cortar la relación, limitar, despedir, o desasociarse de esas personas que no nos beneficien, a favor de la obra que Dios nos he encomendado; iglesia, célula, empresa, matrimonio.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El caracter, y los valores son muy importantes en la vida. mucho mas importante que lo que vemos y sentimos.

devocionales biblico cronologico dijo...

AL final lo que no da un buen fundamento donde podemos edificar con seguridad es nuestra vida es nuestro caracter